viernes, 25 de diciembre de 2009

Salvar a Dios



Salvar a Dios,

recoger restos olvidados,

tímidos reflejos,

y los trozos descompuestos

arreglarlos con mis manos.


Mimar la pobre esperanza,

darle firme apoyo y alas,

recoger todos los llantos

en mi regazo

y desbrozar la senda

del ser humano.


Salvar el mundo soñado,

diseñarlo

y adornarlo con pasión

tratar con cariño

a todo lo que hay creado.


Besar el suelo de mi planeta,

curarlo de sus tragedias,

de sus heridas,

acompañarlo en el tiempo del dolor

y del desgarro

y contagiarlo de mi energía.


Salvar la amiga palabra,

el camino interno

y el abrazo y el beso.

Trabajar para la paz del universo.

1 comentario:

La Dama Zahorí dijo...

Simplemente maravilloso.

Un afectuoso saludo.

Preguntas abiertas

  Somos preguntas abiertas al universo, buscamos respuestas, soluciones, aclaraciones, en todo lo que nos sucede. Anhelamos seguridades en c...